De niña me envolvía la pregunta por el alma humana, los misterios de la vida e incertidumbre de la muerte, que entendía como la fundición de mi consciencia con el vacío del Universo. En mis años de adolescencia encontré en el dibujo y la escritura los medios para plasmar mis más profundos cuestionamientos y las sensaciones de desconocimiento que me llevaban al miedo, algunas veces, al pánico. Estudié psicología, seducida por el psicoanálisis freudiano y lacaniano que me presentaron la investigación del Inconciente (con mayúscula).
Llegó fervorosa una necesidad de expresar los avances en mis divagaciones a través del cuerpo (y no solo las palabras), sus formas y movimientos ... y así conocí la danza, que en sus posibilidades y limitaciones me incitó a buscar sensaciones más riesgosas...llevándome directo al amado circo.
El circo, la danza y la más reciente forma de expresión que investigo, el butoh, son caminos de manifestación de mi mundo interno... de lo que conozco y lo que no conozco. Cada pieza que creo es mi diario de autoanálisis, la investigación sobre mi mente, mi alma y mi Conciencia; un reflejo de mi interno, cuya forma final desconozco y creo que desconoceré, pero cuyas partes me permiten observarme desde afuera, descifrarme y descifrar lo que me rodea... pues como es lo micro, es lo macro, como es arriba, es abajo, como es la mente, el Universo.
Mi autoanálisis no solo apunta a conocerme, pues veo al Universo como la matriz que me envuelve, me da forma y me refleja, así como yo la reflejo a su vez. No soy una gota aislada del océano, soy su condensación, la partícula a través de la que puedo llegar a observar la existencia. Por eso me apasiona estudiar todo lo que me de información sobre el Universo... física cuántica, leyes de la hermética, geometría sagrada, astrología, tarotología y otras cuantas ciencias ocultas, asi como teorías conspiranóicas y todo aquello que contribuya a descifrar esta forma de existencia.
Al final busco la expresión de todos estos contenidos racionales e irracionales en mis creaciones. El escenario es mi página en blanco, mi lienzo; mis movimientos son los colores; los mensajes son mi Inconciente cuya sabiduría se extrae de las fuentes de un Inconciente colectivo y el resultado de esta búsqueda creativa es la metáfora de mi misma y así, de los mundos que soy interna y externamente. En el esfuerzo por dar a luz todo esto no coharto mis libertades expresivas, deseo permitir que aflore todo aquello que quiere aflorar, bajo un ojo observador que se cuida de no censurar. Por eso me permito utilizar lenguajes diversos, abstractos, grotescos, inmorales, bizarros, absurdos, surrealistas... o sin más, poéticos, metafóricos, simbólicos.
Por ahora me defino como amante de la vida y el Universo, buscadora en el arte, del presente... Investigadora de las profundidades del alma humana y de las claves que conducen a la cura y a la creación...